Cerca de 6.000.000 de venezolanos han salido de Venezuela y en la actualidad, Colombia es el país que mayor número de migrantes y refugiados venezolanos acoge. En efecto, la cifra de migrantes y refugiados venezolanos ha venido en aumento desde el 2015: para ese momento, había 31.741 venezolanos, para el 2017 403.702, para el 2019 1.771.237 y a agosto de 2021, 1.842.390 venezolanos viven en el país.
Para responder a tal flujo migratorio mixto, el Consejo Nacional de Política Económica expidió el CONPES 3950 de 2018, en el que estableció una hoja de ruta para la recepción e integración de las población venezolana, y se definieron las entidades responsables para llevar a cabo esos procesos. De esta forma, de manera progresiva, diversas instituciones del Estado han garantizado el acceso a servicios sociales básicos para asegurar la estabilización de las personas venezolanas, y a la vez, se crearon mecanismos de flexibilización migratoria para lograr su inserción social y económica.
Como muestra del compromiso del Gobierno Colombiano en asegurar una migración ordenada, segura y regular, y que redunde en la integración socioeconómica de los migrantes venezolanos, a través del Decreto 216 de 2021, se adoptó el Estatuto Temporal de Protección para Migrantes Venezolanos -ETPV- . Este instrumento jurídico, que es implementado por primera vez en la región, permite que los migrantes venezolanos accedan a un Permiso por Protección Temporal – PPT-, que al ser un documento de identificación, posibilita el acceso en igualdad de condiciones a todos los servicios públicos y privados en Colombia.
Adicional al ETPV, se expidió la Ley 2136 del 2021, que define la Política Integral Migratoria -PIM- del país. La PIM establece lineamientos para que de forma intersectorial se generen mecanismos que permitan que las migraciones sean un factor para el desarrollo de Colombia. El capítulo V de la PIM contempla acciones para la integración socioeconómica y productiva de los migrantes, y contiene las tres líneas de la Estrategia de Generación de Ingresos, liderada por la Oficina para la Atención e Integración Socioeconómica de Migrantes de la Presidencia de la República.
La integración socioeconomica de la población migrante parte necesariamente de la efectiva incorporación de esta población a la vida productiva, bien sea mediante la empleabilidad o mediante el emprendimiento. Por ello, es necesario generar oportunidades tanto laborales o que faciliten el emprendimiento de la población venezolana en el pais. La integración de los migrantes al mercado laboral colombiano significa no solo un aumento de la mano de obra, sino también más recursos para el consumo (alimentos, ropa, vivienda, etc.), lo cual a su vez genera nuevos empleos para la economía. y se traduce en un aumento de los recursos tributarios sobre el consumo, a través el IVA. Asimismo, los migrantes que tienen empleos formales o que registran empresas aportan cada mes al sistema de protección social del país y pagan impuestos que alimentan las cuentas del Estado. A la postre, la integración económica de los migrantes significa una menor presión sobre los programas sociales del Estado, así como más recaudo tributario.
